Orientaciones a todas las células del Partido
Verano de 1937
Estimados camaradas, Salud: Los agudos momentos que vivimos exigen un método de trabajo rápido y eficaz. No podemos perder el tiempo, que nunca fue tan preciado como ahora, en discusiones teóricas, que resultarían palabrería hueca, de no ir acompañadas por resoluciones urgentes y prácticas. Las tareas del Partido han de ser planteadas en el seno de las Células y llevadas a la aplicación a un ritmo aceleradísimo.
Estamos en un período en que se precisa hacer llegar a las masas el convencimiento de la eficacia de nuestra política, no sólo a través de palabras, sino con la demostración en hechos concretos, en los que vean ventajas reales.
Infinidad de veces se ha hablado de la limpieza de la quinta columna; incorporación de la mujer a la producción; eliminación de los emboscados; construcción de refugios, etc. Pero ¿qué adelantos se han hecho en estos problemas y qué actividad hemos desarrollado nosotros como Partido para resolverlos?
Hablando con franqueza bolchevique, tenemos que reconocer las enormes deficiencias de nuestro trabajo. No supimos movilizar las masas; no supimos llegar a ellas a través de nuestro ejemplo práctico, y, por tanto, nuestras palabras y nuestras consignas, plenas de justeza política, han quedado muchas veces en el vacío.
¿Podemos continuar nosotros, comunistas, en esta situación? ¿No seremos capaces, como Partido, de llegar a las masas en estos históricos instantes, y movilizarlas al impulso de las crudas necesidades que la lucha nos presenta?
Tenemos confianza en los militantes del Partido. Obligación sagrada para nosotros es comprender y responder en estos graves minutos, a las exigencias de la lucha y saber afrontarlas con serenidad y con eficiencia.
¿Cómo realizar prácticamente las tareas del Partido?
LIMPIEZA DE QUINTA COLUMNA: Todas las Células se preocuparán de este problema, designando camaradas, especialmente mujeres, que se dedicarán a ejercer una estrecha vigilancia de clase en las barriadas, departamentos, cooperativas, fábricas, talleres, en todos los lugares donde la Célula esté encuadrada.
En todos estos sitios, será preciso desenmascarar a los elementos reaccionarios, derrotistas o dudosos, que resultan perjudiciales a la causa. Tomar rápida nota de ellos y enviarla a este Comité Comarcal, para proceder en consecuencia.
Observamos en la Comisión de Orden Público, una reacción francamente favorable para la depuración. Tenemos que aprovechar esta situación y coadyuvar intensamente, prestando nuestro más decidido concurso, en tanto que Partido, a la labor de aniquilamiento de la quinta columna. Ni un comunista debe vacilar en denunciar a sus propios familiares, si los considera perniciosos para la causa del pueblo.
CONSTRUCCIÓN DE REFUGIOS: Tampoco en esta interesantísima tarea hemos trabajado como debíamos. Es conveniente rectificar, porque todavía estamos a tiempo. Las Células deben examinar los lugares donde están encuadradas buscando el sitio más adecuado para instalar un refugio. Una vez conseguido esto, se procederá a nombrar una comisión de dos o tres compañeros para que se entrevisten con la Junta de Defensa Civil y soliciten instrucciones, materiales, etc. Después, con todo esto realizado, se convoca Asamblea abierta de barriada o fábrica, etc., para dar cuenta a los trabajadores de las gestiones hechas y comenzar su construcción. Haciendo los trabajos principales de iniciativa los comunistas, las masas verán nuestra preocupación constante por sus vidas y se ligarán a nosotros.
INCORPORACIÓN DE LA MUJER: Se ha hablado mucho de esta consigna pero prácticamente muy poco se ha ejecutado por la incorporación de la mujer a la producción. Hemos hecho muy pocos avances efectivos en este aspecto. Todas las Células de empresa o departamento deben hacer una detallada estadística, dando número de compañeros que en tales lugares pueden ser sustituidos por mujeres en sus ocupaciones, e incorporándolos a las brigadas de fortificaciones o a las brigadas de reserva. También se pueden crear comisiones de mujeres que vayan de inspección a las fábricas, examinando los trabajos que ellas pueden realizar.
AYUDA A LOS REFUGIADOS: En tomo a este problema hemos trabajado pero muy desorganizadamente y no precisamente por la base, sino a través de la dirección femenina del Comité Comarcal. Pero es necesario reorganizar el trabajo y hacerlo de una manera coordinada para hacerlo efectivo. Es preciso crear comisiones de trabajo que se dediquen a la búsqueda de pisos donde alojar a los camaradas refugiados. Para esto, la Secretaria Femenina del Comité Comarcal os podrá dar instrucciones concretas.
MOVILIZACIÓN PARA RESERVAS MILITARES: Para este problema ya hemos cursado orientaciones en circular aparte.
MORAL Y UNIDAD DENTRO DEL PARTIDO: Para la buena y rápida realización de estas tareas, se necesita elevar muy alta la moral dentro de nuestro Partido y mantener más firme que nunca la unidad política en sus filas. Hoy, con más motivo que en ningún otro momento, es obligatorio el estudio político dentro de las Células de todas las tareas del Partido y actuación de los camaradas, especialmente de los que tienen puestos de responsabilidad. No se puede consentir y sería suicida hacerlo así, romper la confianza en nuestros cuadros dirigentes. Si alguno vacilase o las Células interpretasen que no cumple su deber como es obligado en estos instantes, tómense resoluciones políticas para discutirlas con el Comité Comarcal o con el Comité Provincial, si preciso fuera.
De no existir esta confianza íntegra en la dirección y de no mantener esta entereza moral que citamos, será muy difícil que el Partido pueda caminar al ritmo que las circunstancias exigen.
FUENTE: Archivo Histórico Nacional, Sección Guerra Civil (Salamanca), Político-Social, Gijón, Sig. F/5918.
Publicado en: Los comunistas en Asturias (1920-1982), VVAA (Coordinador: Francisco Erice). Editorial Trea, Xixón, 1996.
Digitalización: El cielu por asaltu.
Estimados camaradas, Salud: Los agudos momentos que vivimos exigen un método de trabajo rápido y eficaz. No podemos perder el tiempo, que nunca fue tan preciado como ahora, en discusiones teóricas, que resultarían palabrería hueca, de no ir acompañadas por resoluciones urgentes y prácticas. Las tareas del Partido han de ser planteadas en el seno de las Células y llevadas a la aplicación a un ritmo aceleradísimo.
Estamos en un período en que se precisa hacer llegar a las masas el convencimiento de la eficacia de nuestra política, no sólo a través de palabras, sino con la demostración en hechos concretos, en los que vean ventajas reales.
Infinidad de veces se ha hablado de la limpieza de la quinta columna; incorporación de la mujer a la producción; eliminación de los emboscados; construcción de refugios, etc. Pero ¿qué adelantos se han hecho en estos problemas y qué actividad hemos desarrollado nosotros como Partido para resolverlos?
Hablando con franqueza bolchevique, tenemos que reconocer las enormes deficiencias de nuestro trabajo. No supimos movilizar las masas; no supimos llegar a ellas a través de nuestro ejemplo práctico, y, por tanto, nuestras palabras y nuestras consignas, plenas de justeza política, han quedado muchas veces en el vacío.
¿Podemos continuar nosotros, comunistas, en esta situación? ¿No seremos capaces, como Partido, de llegar a las masas en estos históricos instantes, y movilizarlas al impulso de las crudas necesidades que la lucha nos presenta?
Tenemos confianza en los militantes del Partido. Obligación sagrada para nosotros es comprender y responder en estos graves minutos, a las exigencias de la lucha y saber afrontarlas con serenidad y con eficiencia.
¿Cómo realizar prácticamente las tareas del Partido?
LIMPIEZA DE QUINTA COLUMNA: Todas las Células se preocuparán de este problema, designando camaradas, especialmente mujeres, que se dedicarán a ejercer una estrecha vigilancia de clase en las barriadas, departamentos, cooperativas, fábricas, talleres, en todos los lugares donde la Célula esté encuadrada.
En todos estos sitios, será preciso desenmascarar a los elementos reaccionarios, derrotistas o dudosos, que resultan perjudiciales a la causa. Tomar rápida nota de ellos y enviarla a este Comité Comarcal, para proceder en consecuencia.
Observamos en la Comisión de Orden Público, una reacción francamente favorable para la depuración. Tenemos que aprovechar esta situación y coadyuvar intensamente, prestando nuestro más decidido concurso, en tanto que Partido, a la labor de aniquilamiento de la quinta columna. Ni un comunista debe vacilar en denunciar a sus propios familiares, si los considera perniciosos para la causa del pueblo.
CONSTRUCCIÓN DE REFUGIOS: Tampoco en esta interesantísima tarea hemos trabajado como debíamos. Es conveniente rectificar, porque todavía estamos a tiempo. Las Células deben examinar los lugares donde están encuadradas buscando el sitio más adecuado para instalar un refugio. Una vez conseguido esto, se procederá a nombrar una comisión de dos o tres compañeros para que se entrevisten con la Junta de Defensa Civil y soliciten instrucciones, materiales, etc. Después, con todo esto realizado, se convoca Asamblea abierta de barriada o fábrica, etc., para dar cuenta a los trabajadores de las gestiones hechas y comenzar su construcción. Haciendo los trabajos principales de iniciativa los comunistas, las masas verán nuestra preocupación constante por sus vidas y se ligarán a nosotros.
INCORPORACIÓN DE LA MUJER: Se ha hablado mucho de esta consigna pero prácticamente muy poco se ha ejecutado por la incorporación de la mujer a la producción. Hemos hecho muy pocos avances efectivos en este aspecto. Todas las Células de empresa o departamento deben hacer una detallada estadística, dando número de compañeros que en tales lugares pueden ser sustituidos por mujeres en sus ocupaciones, e incorporándolos a las brigadas de fortificaciones o a las brigadas de reserva. También se pueden crear comisiones de mujeres que vayan de inspección a las fábricas, examinando los trabajos que ellas pueden realizar.
AYUDA A LOS REFUGIADOS: En tomo a este problema hemos trabajado pero muy desorganizadamente y no precisamente por la base, sino a través de la dirección femenina del Comité Comarcal. Pero es necesario reorganizar el trabajo y hacerlo de una manera coordinada para hacerlo efectivo. Es preciso crear comisiones de trabajo que se dediquen a la búsqueda de pisos donde alojar a los camaradas refugiados. Para esto, la Secretaria Femenina del Comité Comarcal os podrá dar instrucciones concretas.
MOVILIZACIÓN PARA RESERVAS MILITARES: Para este problema ya hemos cursado orientaciones en circular aparte.
MORAL Y UNIDAD DENTRO DEL PARTIDO: Para la buena y rápida realización de estas tareas, se necesita elevar muy alta la moral dentro de nuestro Partido y mantener más firme que nunca la unidad política en sus filas. Hoy, con más motivo que en ningún otro momento, es obligatorio el estudio político dentro de las Células de todas las tareas del Partido y actuación de los camaradas, especialmente de los que tienen puestos de responsabilidad. No se puede consentir y sería suicida hacerlo así, romper la confianza en nuestros cuadros dirigentes. Si alguno vacilase o las Células interpretasen que no cumple su deber como es obligado en estos instantes, tómense resoluciones políticas para discutirlas con el Comité Comarcal o con el Comité Provincial, si preciso fuera.
De no existir esta confianza íntegra en la dirección y de no mantener esta entereza moral que citamos, será muy difícil que el Partido pueda caminar al ritmo que las circunstancias exigen.
FUENTE: Archivo Histórico Nacional, Sección Guerra Civil (Salamanca), Político-Social, Gijón, Sig. F/5918.
Publicado en: Los comunistas en Asturias (1920-1982), VVAA (Coordinador: Francisco Erice). Editorial Trea, Xixón, 1996.
Digitalización: El cielu por asaltu.
Etiquetas: Guerra Civil
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